No olvidemos las exigencias ni la firmeza al exigir. Pero
sonrisas, venga.
Aunque ya lo imaginaba, ahora que ando intentando escribir un texto para niños me doy absolutamente cuenta de lo difícil que es. Y más dificil aún, claro, intentar hacerlo bien. Miro textos, series de dibujos, en fin.
Una de mis series favoritas sigue siendo Pinky Dinky Doo de la que ya hemos hablado por aquí. Con ese personaje tan majo, Bobby Boom, que se desplaza en silla de ruedas y es más listo que el hambre. Aunque, la verdad, lo echo en falta en muchos episodios. No lo sacan mucho, no, al Bobby Boom motorizado. Me ilusioné mucho cuando vi las primeras veces la serie. Pero parece que a los guionistas les cuesta un poco imaginar qué puede hacer este personaje.... ayssssss.... Así que yo les diría eso de ¡más Bobby Boom en las historias de Pinky, más, que no puede ser tan dificil para unos guionistas tan buenos!
De todas formas, Daniel se lo pasa en grande con la serie (y con otras, claro -ah, se me ocurre que podemos ir haciendo algunos posts de sus series favoritas en la actualidad, y seguro que vosotros podréis aportar otras tan o más intesantes).
Se lo pasa en grande, digo, y hace unos esfuerzos fantásticos por contestar a las preguntas que siempre plantean al final Pinky Dinky Doo y su hermano Tayler Dinky Doo en los juegos didácticos . El otro día le pillé contestando ¡¡NO!! a una de esas preguntas (lo cual era correcto, por cierto) - ¡ja, le pillé!,
y es que Daniel nunca suele contestar, cuando tiene una respuesta negativa, a nuestras preguntas; si es afirmativa, utiliza el "sí" perfectamente, pero si es negativa su respuesta normalmente se calla (así como en plan despectivo, digamos, o "muy político", no sé, no sé..) - ya le vale.
Enlazo unos breves videos sobre los personajes de la serie: allí podéis ver a Bobby Boom, ¡el gran Bobby!.
3 comentarios:
Ya lo he dicho otras veces, pero me alegro de ver los dibujos que hay ahora... parece han dado en el clavo: ni el exceso de moralina de unos, ni el mal gusto de otros.
Me gusta cómo están dibujados, por cierto.
Besos.
Rosa.
Tendré que fijarme en esa serie alguna vez que mi nieta la esté viendo. No recuerdo haber notado ningún personaje con silla de ruedas.
Donde sí me he dado cuenta que sale uno (de vez en cuando sólo, como si les costara) es en la de Clifford, el Gran Perro Rojo.
Realmente es difícil escribir para niños porque es más necesario atraerlos por el fondo que por la forma -siempre directa a su modo de comprender.
En mi experiencia de abuelo cuenta-batallitas a mi nieta de 4 años he notado el éxito de algunos cuentos (contados) tomados de la sorprendente realidad con los nombres propios de sus protagonistas verdaderos.
Creo que llevo elaboradas unas veinte variaciones sobre el "sucedido" en que una paloma en vuelo rasante se cagó (imprescindible esa palabra así) en el cucurucho de patatas fritas con mayonesa que su madre se disponía a degustar tras adquirirlo en un puesto callejero de Amsterdam a sus diez años. Y encima con final feliz porque el señor del puesto se compadeció del llanto de la niña y le dio otro cucucucho.
Desde luego la variante preferida es la narrada desde el punto de vista de la paloma.
Ya contarás más cosas sobre personajes que le gusten a Daniel.
Besos.
Los personajes y argumentos de esta serie, Rosa, Ybris, me parece en general estupendos y muy adecuado el lenguaje desarrollado.
Bobby Boom, Ybris, la verdad es que no sale mucho. Hay uno o dos capítulos en los que es protagonista. Pero la serie tiene bastantes capítulos. O sea que la proporción no es muy grande. Y en el resto sale más bien poquito. Yo me puse muy contenta cuando descrubrí la serie, porque coincidió que aquel día salía Bobby, y dije ¡caramba! Pero luego , ya te digo, con cuentagotas pueden contarse las apariciones. En fin.
Besotes, majos.
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