ESTAMOS AQUIEste enlace que encabeza el post de hoy dirige a un artículo que figura en la web oficial del Ministerio de Educación de Perú. Figura en los primeros puestos de entre los resultados que se obtienen en Google si uno teclea las palabras "educación inclusiva". Aseguran las autoridades educativas peruanas que en el año 2008 más de 28 mil niños y niñas con discapacidad se integraron en las actividades de las escuelas "regulares" y que la planificación es que en el año 2011 esa cifra crezca hasta los 50 mil niños y niñas.
Este otro enlace es de una página de la Unesco, en la que en previsión de la Conferencia que se celebró en noviembre del año pasado se establecen algunos de los objetivos y presupuestos que delimitan el concepto de educación inclusiva.
CONFERENCIA INTERNACIONAL DE EDUCACIÓN - aquí podéis leer el documento íntegro relativo a dicha conferencia
La documentación en torno a la educación inclusiva es ya muy abundante. En algunos países, como el citado Perú, parece que por lo menos hay un planteamiento de llevar a la práctica los programas inclusivos -desconozco la penetración real de los mismos o si están consiguiendo funcionar adecuadamente, pero que en los planes de educación ya sean considerados me parece un logro: entre otras cosas porque aquí en España yo no conozco muchas experiencias similares, aunque en algunas Comunidades Autónomas si que parecen existir algunos planteamientos tendentes a la inclusión. Desde luego en la que yo vivo, no.
Por eso me pareció destacable la experiencia que llevan a cabo dos colegios de Zaragoza, uno de educación especial, el Jean Piaget, y otro de educación "regular", el Goya II. Ambos colegios, situados uno junto a otro, comparten una zona de recreo común y a raíz de éso han empezado a llevar a cabo de forma periódica algunas actividades conjuntas. Vi el otro día un reportaje en un informativo de Aragón Televisión (la cadena de televisión autonómica): en él los chavales de uno y otro centro compartían juegos, pero también la hora de comedor, por ejemplo. No parecía haber demasiado problema de entendimiento entre ellos, ni de los chavales sin problemas para comprender cómo debían actuar hacia sus compañeros con discapacidad para conseguir que éstos siguieran un ritmo común en las actividades, o incluso para si hacía falta ayudarles en algunas cosas, como con la comida. No veían esta ayuda como algo excepcional o raro: era lo lógico y no implicaba por su parte una actitud de lástima, ni de extrañeza, ni ninguna otra de las "emociones negativas" con las que los adultos solemos reaccionar demasiadas veces. Es un ejemplo quizás pequeño, quizás aíslado, sí. Esta fórmula de convivencia no es igual que la educación inclusiva, no, desde luego que no. Pero de alguna manera pero pareció un indicio, un comienzo.
*** la imagen proviene de la web citada del Ministerio de Educación de Perú, y es genial.
6 comentarios:
No sé muy bien que programa de integración hay en el cole de mi hijo (en Valencia) pero tiene una compañera de clase autista (Esther).
Y como desconocedora total del diagnóstico o de los problemas de esta niña, sólo puedo decir que es una más desde el primer curso de eduación infantil a hoy que van a 2º de Primaria.
Aúnque ella no juega con ninguno, ni les dirige la palabra, es una más. Cuando tienen una salida extraescolar siempre va de cada mano con un compañero. Siempre está invitada a los cumples de sus compañeros y todos la cuida mucho.
Es una niña fantástica.
Y observando otros casos, me he dado cuenta que estos niños con problemas y tanta dependencia de sus padres, dan mucho mucho amor y ternura.
Probablemente den más que reciban!
Ese ejemplo que pones de estos dos colegios me ha gustado, y también que Aragón Tv. se haya fijado en ello... no sé si es educación inclusiva, pero creo que está claro que puede ser muy bueno... estaría bien que se le diera más difusión a las actividades de estos dos colegios a ver si otros seguían su ejemplo, ¿no?
Besos.
Rosa.
No sabía nada de esa prueba en el Goya y me alegro de verdad. Es un comienzo y una forma de demostrar lo que todos intuímos: que la escuela inclusiva es una necesidad..un derecho diría yo. Para TODOS los niños, para nuestro proyecto de sociedad adulta.
En un rato visito los enlaces que dejas.
Haré por ver también ese reportaje de Antena Aragón..
Besicos mil.
Es consolador visitar esta página y ver la cantidad de gente que hace mucho más que quejarse.
Y descubrir con eso que son los que de verdad pueden quejarse.
Besos.
Estels, el caso que comentas creo que se encuadra mejor en el ámbito de la integración que de la inclusión. Este concepto es mucho más transversal y más comprometido socialmente. Pero desde luego lo que está claro es que los chavales, todos, son más capaces que los adultos de acometer con naturalidad las diferencias e integrarlas en sus contextos.
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Desde luego, Rosa, que hay que darle difusión a estas cosas. Y ojala que el ejemplo cunda, sería estupendo: que poco a poco cada vez la extensiòn de estas actividades fuera mayor.
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Bien dices, MIma, la escuela inclusiva es UNA NECESIDAD (y ya está, es así).
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A veces uno se cansa de quejarse, Ybris. Por eso creo que es mucho más efectivo ir haciendo a ver si al final las cosas se caen de maduras.
Hola Luisa.
Creo que en educación especial no es infrecuente la ubicación del centro cercana a otro de educación ordinaria, de forma que se puedan programar actividades conjuntas y, especialmente, que niños de ambos centros se puedan beneficiar de una educación combinada. Por ejemplo, el centro de Andorra también cuenta con este recurso.
Llego hasta aquí a través de Lamima. Quizá me vieras en el reportaje de Antena Aragón, pues andaba bien cerca de allí.
Para despedirme te diré que creo haber aprendido este curso por qué llaman a estos centros "de educación especial": no es sino por las familias que tienen buena parte de los niños que allí acuden.
Saludos.
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