miércoles, 30 de julio de 2008

Mi amigo Marcos



Hola a todos, soy Inma. Hace unos dias que no escribo nada por falta de tiempo más bien, ya que desde que terminó el colegio, aunque Daniel va al campamento por las mañanas, mi vida casi es ahora más complicada y atareada y ando siempre entre fogones. Pero hay algo que quiero compartir.

Ayer por la tarde Daniel y yo hicimos una "excursión" a casa de mi amiga Beatriz. Digo bien cuando digo excursión, ya que vivimos cada una en una punta de la ciudad y tenemos una media hora de trayecto en coche, pero ayer tenía muchas ganas de verla. Beatriz es mi mejor amiga desde tiempos remotos, hace como 17 años y tiene dos hijos estupendos que son Marcos y Lucas. El día 27 fue el cumpleaños del pequeño Lucas y había que llevarle el regalo ayer, ya que el domingo no pudimos ir a verle porque estaba en el pueblo.

Pues como digo fuimos a verles y al llegar Daniel, claro, protesta al canto, cuando vio que nos metíamos en el ascensor. Le tuve que explicar un par de veces (aunque ya lo sabia) que íbamos a darle el regalo a Lucas y que luego nos iriamos a merendar también con Marcos y Bea, y que pronto volvíamos otra vez al coche: lo de bajar del coche a veces para Daniel es hasta traumático, porque le encanta pasear en el monovolumen. Cuando llegamos, y se dio cuenta de que sólo estaba Lucas y encima estaba dormido, con lo que no iba a hacerle caso ni a jugar con él se puso a protestar de tal manera que lo tuve que coger en brazos. Bueno, algo así como a los 10 minutos de haber llegado volvían Marcos y Beatriz del dentista y lo sorprendente de todo esto es que desde que apareció Marcos con la Nintendo ya no hubo niño (y me refiero al mío). Marcos se sentó a mi lado y Daniel se tiró literalmente encima de Marcos para verle jugar en esa minúscula pantalla. A Bea, a mi y a su abuela Rosa, nos entró la risa porque si no se ve no se puede creer, era como si la Nintendo tuviera un potente imán que atrajera a Daniel sobre todas las cosas.

Aun más sorprendente como siempre fue para mi el comportamiento de Marcos. Debo señalar que todavía tiene 7 años, pues cumple los 8 al mes que viene, y siempre que está con Daniel le observo una sensibilidad y un cariño bastante sorprendentes hacia mi hijo. Marcos estaba jugando a un juego de esos de darse puñetazos y Bea le dijo que le contara a Daniel todo lo que iba haciendo, pero como vio que no podía explicarle bien lo que hacía, en un momento determinado me dijo: " Tía, ya sé que voy a hacer, tengo un juego que le va a gustar que es de memorizar sonidos y yo creo que le va a gustar". Apagó el juego con el que trasteaba y se fue a buscar el otro para que pudiera jugar Daniel y me volvió a preguntar: "Tía, qué tal maneja las manos? Tú crees que podrá jugar si se la dejo?" Yo le dije que era muy complicado y no se cortó un pelo, me contestó: "Pues toma el lápiz y juega tu con él, enséñale y jugáis juntos". Y me dejó la Nintendo, ¡ que no se la deja ni a su hermano!, para que jugase Daniel.

La verdad es que no dejo de sorprenderme, como he dicho antes de lo atento que está siempre con Daniel. Me señaló varias veces que se le caía la babeta –lo que les ocurre a muchos niños con parálisis cerebral-, y él mismo se la limpió con un pañuelo de papel. Me pidió que lo sentara a su lado a ver los dibujos y, aunque Daniel no estaba muy por la labor, lo intenté pero no funcionó. Sin embargo, Marcos lo entendió y siguió estando pendiente. Claro está que a Daniel le pirra que le presten tanta atención. Aunque esta relación entre ellos pueda parecer algo sin importancia para mí la tiene y mucha.

Creo que en este mundo debería haber más Marcos sueltos por el mundo y supongo que los habrá. No sabe este chico lo que agranda mi cariño por él cada vez que le veo un detalle de estos con mi hijo. Estoy segura de que si Daniel no tuviera problemas hoy en día serían inseparables como lo somos su madre y yo. Gracias por estar ahí a los dos.

En la foto que he colgado están los dos hermanos Marcos (el mayor, de pie) y Lucas (con cara de ratoncillo) junto a Daniel.

*Notita que añade Luisa: gracias a Antón Castro por hacerse eco de esta historia (un beso, guapo)

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Serán inseparables, si es que no lo son ya... es una suerte tener amigos así, son de los que duran para siempre.
Besos.
Rosa.

Anónimo dijo...

Cuanto me gusta leer esto Luisa...cuanto.

Anónimo dijo...

Las cosas más bellas del mundo no se ven con los ojos, sino sólo con el corazón humano. - Grácias Marcos.

Magda Díaz Morales dijo...

Siempre he pensado en la belleza que los niños nos muestran constantemente, esa amistad real, auténtica, llena de amor sincero, por eso tan generosa en el saber dar y saber recibir.

Cuanto tenemos los adultos que aprenderles...

Un besito a los tres.

ybris dijo...

Ya echaba de menos pasar por aquí. Diversas circunstancias de conexión y tiempo me han mantenido alejado de los comentarios -que no de la lectura-
Desde la fecundidad de la idea de escuela inclusiva hasta este hermoso relato de comprensión infantil pasando por todas las formas de insuficiencias y logros de la Ley de Adaptación me ratifico en la idea de que, gracias al esfuerzo de tantos y tantos, la sociedad se va sensibilizando con respecto al colectivo de dependientes y valorando positivamente la entrega de muchos para que todos tengan acceso al derecho que les asiste de llevar una vida digna y feliz.
Un abrazo a toda esa increíble familia que tanto cariño os habéis sabido ganar.
Un montón de besos a Daniel.

Anónimo dijo...

Inma, tocaya, que quería decir que te agradezco a tí este post tan positivo (la costumbre de que Luisa escriba más, sorry).
Se perfectamente como te tienes que sentir con Marcos porque es maravilloso observar que nuestros hijos son tratados con cariño, con respeto..ver que cuentan con ellos.
Yo quiero creer que cada vez hay más "Marcos" por el mundo: si, los hay y lo que queda....
Un abrazo.

Anónimo dijo...

Hola, tengo una muy buena noticia que daros! yo conozco a otro "Marcos", se llama Sabela, era compañera de mi hija Clara en la guardería, y si Dios quiere su "más mejor amiga" para siempre! Sabela está siempre a su lado, integrándola constantemente, aunque Sabela es todo energía cuando está con Clara se sienta a su lado, solo juega a las cosas que mi hija puede hacer como arrastrarse por el patio y esconderse debajo del tobogán! Y lo más increíble es como entiende lo que le pasa a Clara, otros niños como ven que usa babero, que no habla, que no anda, la tratan con cariño pero como si fuera un bebé; Sabela me dice cosas como: (situación: Clara sentada en lo alto del tobogán y yo sujetándola) " y si la ayudamos a sentarse un poco más para atrás no se aguantará mejor?" y cuando llego a buscar a Clara a la hora de la siesta están las dos en la misma colchoneta abrazadas y dándose besiños, etc etc etc SABELA TIENE 3 AÑOS Y ES OTRO ÁNGEL!!!!!!!!!

Paula

Miguel Ángel Yusta. dijo...

Sueños y esperanzas


El día ha sido especialmente duro y acaso el sol ha cortado sueños muy de mañana y encendido alguna desesperanza. ¡Son tan iguales los días y tan difícil a veces reanudar el camino! Tal vez lo pensabas ya al ir al trabajo, una vez que habías dejado a los niños en el colegio y antes de escaparte a la compra breve de media mañana. La comida y la plancha las dejaste casi terminadas anoche, antes de sacrificar la película de la tele para terminar de ensamblar tu trabajo, tu charla, tu libro o tu ejercicio de oposición.
Y es que cada ayer parece anunciar una realidad hermosa pero cada amanecer tú miras ese lecho donde todavía sueña una de las razones de tu vida: ese hijo con una deficiencia que precisamente quebró la luz de tu mirada y dejó lleno de sombras un espacio que te cuesta recuperar. Pero la lucha continúa y a cada contrariedad contestas con una nueva y más decidida idea de continuar y vencer: esa es la verdadera guerra, sorda, prolongada tenaz. Esa y no otra es la batalla que tantos libran a diario con la vida.
Eres, madre, la heroína de esta historia de amor. Nada hay parecido a tu entrega continuada, a ese sacrificio constante. Tampoco nada puede compararse a la ansiedad que sientes por no poder dar todo lo que quisieras con tal de hacer que un amanecer cualquiera fuese diferente y mejor. En un mundo de hombres inmersos en ser cada día más poderosos, más ricos, más dueños de todo, aunque sea a costa de la supervivencia de los que tienen muy poco, tu figura de mujer y madre, se engrandece.
Tu labor callada y tu entrega, con momentos buenos y otros de cansancio y tal vez desolación, deben alertar a muchas personas que siguen escuchando solamente la frenética música de un bienestar sin pararse a pensar que, tras el escenario, diariamente, existen miles de mujeres como tú, de personas como tú, que hacen posible la cadena del auténtico amor.

(Este artículo, publicado hace años en Heraldo de Aragón, te lo dedico a ti, Inma, con todo cariño)

M.A.Y.

Luisamiñana dijo...

Gente como Marcos y su familia, como vosotros todos, queridos amigos, ayudan y mucho, no sabéis cuánto. O si lo sabéis: Inma, Paula, vosotras que compartís de cerca las ansiedades como las que describe el "todo corazón" de Miguel Angel Yusta (!vaya relato, rey¡). Sois todos estupendos, de verdad.
Paula: inmensas Clara y Sabela, inmensas, ¡qué alegría me ha dado leerte!

Isabel Barceló Chico dijo...

Espero que Daniel y sus amigos disfruten de un buen verano. Lo tienen muy merecido. Besos.